lunes, 11 de agosto de 2014

CHARLES SEGUIN. Un asombroso empresario. -Esplendor y ocaso de la poderosa South American Tour-

Por Carlos Szwarcer

La trayectoria de un destacado magnate de la noche e impulsor de diversas áreas de la industria y el comercio,  con sede en la Argentina y proyección internacional (1900-1930)

Durante las investigaciones que realicé para escribir el libro “Teatro Maipo. 100 años de historia entre bambalinas” (2010), me detuve atentamente en la figura de Charles Seguin. Me sorprendí al percibir que no sólo fue importante por construir y ser el dueño de la prestigiosa sala inaugurada el 7 de mayo de 1908 con el nombre de Scala (luego Esmeralda y Maipo), en Buenos Aires. No imaginé que al profundizar en la historia de este “hacedor”, un verdadero “self made man”, se abriría un enorme abanico de información que lo relacionaba con grandes hitos históricos de Buenos Aires, trascendiendo el mundo del espectáculo y también las fronteras.

Los apuntes que aquí presento son apenas algunas menciones - la punta de un iceberg – de la aproximación a este gran protagonista del show  business de Argentina y de grandes centros de esparcimiento del exterior. Casi podría decirse que este texto no es otra cosa que una suerte de índice del libro que me encuentro escribiendo sobre la vida de Charles Seguin,  su contexto, preponderancia, e influencia en las tan curiosas e interesantes tres primeras décadas del siglo XX.

CHARLES SEGUIN 
Nacido en Bienne, Suiza, el 28 de enero de 1877,  el joven Charles arribó a la Argentina hacia 1895, a los 18 años, procedente de Francia. Personaje enigmático y novelesco, sus comienzos estuvieron fuertemente ligados al ambiente artístico, la noche y todos los caminos o atajos que llevaban al divertimento, no obstante, trascendió el ámbito del mundo del espectáculo hacia un inmenso imperio económico de variados rubros y de extensas ramificaciones. No deja de llamar la atención como magistralmente acrecentó su fortuna con increíble astucia, invirtiendo y multiplicando sus ganancias rápidamente, y tempranamente acumulara entre 1900 y 1915 acciones de importantísimas  Compañías.


MONTECARLO

En  1910 compró  más  de 67.500 hectáreas en el Alto Paraná (Misiones, Argentina). Cuatro años después constituyó una sociedad con Gustavo  Haack: la Misiones Land Company, entidad comercial que estableció el  obraje denominado: Puerto Haack, que con el tiempo pasó a llamarse “Montecarlo” en honor a Carlos Seguin. Los montes fueron explotados para extracción de madera y yerba natural.

Al venderle Seguin gran parte de estas tierras a Carlos Culmey, éste dio inicio a una colonización con inmigrantes de habla alemana, en mayo de 1920. Esta obra colonizadora de Misiones se desarrolló sobre el aporte previo de población criolla que ocupaban las tareas del obraje y que se  convirtieron  en  guías  de  los  alemanes, transmitiéndoles  a  estos sus saberes en relación al monte  y la fauna del lugar.

La  SAT (Sociedad Anónima South American Tour)

En los primeros años del siglo XX se acentuaron en la Argentina los rasgos de la impronta inmigratoria. Paradójicamente, en tanto que una economía agro exportadora dejaba saldos a favor en el comercio exterior, y en líneas generales existía una tendencia a la prosperidad económica, el descontento social se evidenciaba en los ánimos de vastos sectores de la población.

Eran tiempos de los esperados y sonoros festejos del Centenario, y Buenos Aires, en tanto  contaba con 1.300.000 habitantes -una de las urbes más grandes del mundo-, sus dirigentes políticos ordenaban la construcción de caminos, canales, vías férreas, o la explotación del petróleo recientemente descubierto en el sur.

En este contexto comenzó a funcionar la SAT (“South American Tour”), empresa de Charles Seguin, creada en 1911, y que por más de dos décadas tuvo su oficina central en la calle Esmeralda 449, Buenos Aires, es decir, en el teatro Maipo.

Tal como consta en archivos y balances, Carlos Seguin, a través de esta Sociedad Anónima, con socios o testaferros, concentró la enorme mayoría de sus emprendimientos. El análisis de los diferentes directorios de su empresa revela un grupo de personajes “fieles” que se repetían y rotaban en todas las actividades, hombres de confianza que a lo largo de los años participaron del perfecto engranaje de un Emporio Comercial montado con sorprendente habilidad.

 Se observan, además, los importantes nombres de las empresas en las que disponía acciones: Compañía Nacional de Carruajes Electromóviles SA., Compañía de Tranways “Eléctricos Buenos Aires”, Compañía Argentina de Teléfonos SA., Sociedad Argentina “Termas Rosario de la Frontera” (Explotación de aguas minerales y sus derivados. Salta). Diamantino (Matto Grosso) Dredging Company, South American Mining Company. Misiones Land Company SA, Banco Francés  del Río de la Plata, Tranways Niza, Cervecería Quilmes, Compañía General de Iluminación y Ornato., Sociedad Anónima Publicidad “TENA”,   etc.

Y en la medida que se abordan los archivos de la SAT y otras empresas. aparecen cantidades de negocios de Seguin requiriendo de significativos capitales,:  La Eléctrica del Norte (Tucumán), Proyecto de ensanche Usina Eléctrica Santiago del Estero, compra y ventas de propiedades en la Capital Federal y en varias provincias (acciones en la Sociedad Inmobiliaria Franco Argentina), extracción minera: cobre, plata y oro (ejemplo: Famatina, La Rioja), Obrajes, industria maderera, producción de Yerba Mate, transportes de Frutos de Brasil, cultivo y producción de Lino, exportación de agua Mineral (Palau), Cantera Albión (Tandil) importación de Automóviles de Dion Bouton como “Único representante en América del Sud”. También propietario o arrendatario de barcos de carga o pasajeros (Formosa, Flecha, Helios y Tritón, etc)

ACCIÓN DE LA " SOCIEDAD ANÓNIMA SOUTH AMERICAN TOUR"


Charles Seguin y el mundo artístico

Además de poderoso dueño o accionista de las compañías arriba mencionadas Monsieur Carlos Seguin se encontraba directamente vinculado a la Sociedad Teatral Ítalo-Argentina,  y regenteaba el Teatro Circo Coliseo Argentino, el Teatro Casino (considerado gran Músic Hall de Sudamérica), el Ópera, el Odéon, el Exelsior, el Porteño, el Maipo, entre otros.

Bajo su control se encontraban lugares paradigmáticos de recreación como el “Pabellón de las Rosas”, espacio de diversión y citas galantes, el “Armenonville”, sitio vinculado a los peregrinos de la noche porteña, el Parque Japonés, obra faraónica con un inmenso jardín para el entretenimiento, el Circo Hippodrome,  el Cabaret Royal Pigall, el Casino Pigall, el Palais de Glace, inaugurado como pista de patinaje y devenido en salón de baile, el Tabaris, el Chantecler, etc

Su profundo sentido de la oportunidad lo llevó a dirigir y expandir sus accionar a Circos, Teatros, Cafés Concerts, Cabarets, Parques de Diversiones, espectáculos de Boxeo y Lucha libre o Zoológicos,  adecuándose empresarialmente  a ambientes populares como a salones para  el gusto de la burguesía y la aristocracia porteña. Invirtió y puso su sello según las necesidades del momento.

Así, el Circo Hippodrome de Carlos Pellegrini y Corrientes propuso  como atracción las “tribus de  Indios” Chiriguanos y Chamacocos, a modo de zoo humano, tal como tenía éxito en Europa este tipo de espectáculo catalogado de exótico.

Para el diversión de la clase más pudiente, que le proporcionaba suculentas ganancias, además incursionó, fundamentalmente, en Hoteles-Casinos, sitios de recreación veraniega como el Casino Real de Montevideo, el Hotel y Casino Real de San Carlos de Colonia del Sacramento, Uruguay, Teatros y Circos en Montevideo. En Argentina el Hotel Termas Rosario de la Frontera (Salta), Savoy Hotel (Tucumán), Hotel Sierra de la Ventana, el Casino de Alta Gracia (Córdoba) y en emprendimientos similares para instalar un Casino en el Tigre Hotel (Pcia de Buenos Aires), o en Viña del Mar (Chile).

Seguin fue parte del Directorio y Administrador General del  “Mar del Plata Jockey Club”,  alquilaba los servicios de traslados de caballos hacia el Hipódromo y ofrecía modernos studs. Esta Sociedad Anónima, al mismo tiempo, realizaba las  ventas de importantes lotes en esta zona costera de la Pcia de Buenos Aires, atractiva para  inversionistas.

En esta ciudad pujante, el empresario expandió su acción a otros derivados del juego, firmando un convenio con el Club Mar del Plata,  arrendándole por varias temporadas sus instalaciones para instalar en exclusividad un “Casino”. Se lo autorizó a la explotación de juegos de azar varios: Ruleta Baccarat, Caballitos, Boulle y Treinta y cuarenta y, desde luego, números de Variedades y Music Hall.

En Sudamérica, Estados Unidos o Europa, en los proyectos comerciales encauzados, las atracciones artísticas eran un complemento indispensable y, justamente, fueron proporcionadas por los mismos teatros, cabarets y representantes artísticos que se encontraban dentro de la esfera de las actividades de la SAT.

Igualmente, en la Argentina, se articulaban en el circuito económico sus empresas de Ornato, iluminación, Publicidad y grandes depósitos para satisfacer todo lo concerniente a los espectáculos organizados en sus locales.

No es casual que Charles Seguin, recibiera el reconocimiento y afecto de los artistas,  reverenciado por ser el “manda más” o “rey de la noche”, o como agradecimiento por brindarles espacio y trabajo en momentos en que, por ejemplo, el Tango o el género revisteril necesitaban de empresarios audaces. Quizás por eso es que Ángel Villoldo, considerado “el Padre del Tango”, le dedicó a Don Carlos Seguin, nada menos que dos de sus emblemáticos tangos: El Esquinazo  y El Fogonazo.

Entre otros hechos históricos acaecidos en sus salones, recordemos, que en el teatro Esmeralda (ex Scala), Carlos Gardel estrenó” el primer tango canción: “Lita” (Mi noche Triste). Madame Rasimí, que revolucionó el género de la Revista con sus “bataclanas”,  fue contratada por Charles Seguín: la francesa, que no era fácil para firmar contratos,  como queda demostrado en varias misivas con el empresario, confiaba solamente en el trato directo con “Don Carlos” para resolver sus presentaciones y traslados a Buenos Aires, Brasil y otros destinos.

Evidentemente, un capítulo aparte es la enorme importancia del rol de Charles Seguin en la difusión del Tango, teniendo en cuenta que los estrenos de ese género por aquella época se produjeron, a menudo, en Teatros de Revistas, Cabarets, y demás sitios de esparcimiento, los cuales eran en muchísimos casos - como hemos señalado - propiedad de este singular empresario de la noche. Por las características de su propio circuito y vinculaciones alentó intensamente la llegada del Tango a Europa, favoreciendo en las primeras tres décadas del siglo XX cientos de contratos artísticos entre la Argentina y el Viejo Continente.

Otra forma del manejo propicio de la coyuntura lo podemos advertir en su gestión en el Palais de Glace, que comenzó como pista de patinaje sobre hielo, luego  escuela de baile, con las famosas tardes de tés danzantes del conde Juan Eugenio de Chikoff , o las muestras de Vogué ´s Club, desfiles de moda, el Ciro´s Club, convirtiéndose en el salón de baile por donde pasaron prestigiosas orquestas de tango. Finalmente, en 1931 el Municipio cedió el Palais de Glace a la Dirección Nacional de Bellas Artes. 
.
La radio y el cine

Seguin pensó el Teatro Coliseo para la actividad circense, en particular con la actuación del famoso payaso Frank Brown, pero al poco tiempo modificó su estilo, convirtiéndolo en teatro lírico para representar famosas Óperas, algunas estrenadas allí antes que en el mismo Teatro Colón. Y  fue en la azotea del Teatro Coliseo donde se realizó la primera transmisión radial en la Argentina.

El empresario, que ya estaba vinculado al mundo del cine desde comienzos de siglo comerciando con Max Glücksmann y León Gaumont, fue accionista y agente de la famosa firma francesa Pathé, e impulsó su proyector en Argentina, Brasil, entre otros países.

TEATRO SCALA (ESMERALDA-MAIPO) Circa 1910.

Los cercanos contactos en esta área se advierten en la elección de los administradores artísticos para el Teatro Scala  ”: José Pepe Costa, que en 1915 le cambió el nombre “Esmeralda”, fue uno de los pioneros de la cinematografía en nuestro país,  y Humberto Cairo - que en 1922 lo llamó Teatro Maipo -  fue productor de la famosa película argentina “Nobleza Gaucha”. Finalmente, Luis César Amadori, de sostenida actividad en este sala fue su director artístico  y, además de comprársela a la familia Seguin, desarrollaría una intensa y exitosa carrera como Director de cine.

El análisis de las decisiones más adecuadas y redituables se encontraban en el aceitado funcionamiento de la SAT, y en el magnífico olfato comercial de su presidente, que en el caso específico de sus espectáculos, además del beneficio económico o el éxito en sí buscaba el placer de “llegar primero” o “descubrir talentos”, tal como se manifiesta en el caso de los famosos  Oliver Hardy y Stan Laurel, cuando los trae a Buenos Aires antes de que fueran el famoso dúo cómico (1926). Ambos cómicos fueron contratados por Charles Seguín para sitios de esparcimiento que manejaba en la ciudad.  En 1914 "el gordo" actuó en "El Pabellón de las Rosas" y en "El Parque Japonés". En 1915 llegó Stan Laurel para presentar su labor payaseca en el Teatro Casino.

En Europa

Intrépido y exitoso en Buenos Aires, con la “South American Tour” el empresario promovió brillantes giras artísticas por todo el mundo. En Europa conquistó Francia, Alemania e Italia. Su presencia  fue  significativa en innumerables contratos de artistas de varietés, espectáculos circenses y cantantes del circuito europeo hacia Sudamérica, y viceversa,.

Se lo vincula con  los comienzos del avanzado y revolucionario Teatro Apollo de París y, a través de la gestión de Mario Lombard, con la sala denominada “Florida”, donde debutó Carlos Gardel en París, en 1928.

Asimismo, en la STIN (Sociedad Teatral Internacional), fue nombrado administrador General del grupo argentino, y por el grupo Italiano se designó a Walter Mocchi. Esta empresa nació el 24 de julio 1908 “para hacer frente a la industria del teatro en todos sus aspectos, desde la gestión de la industria del entretenimiento, la adquisición y construcción de salas de cine en Italia y en el extranjero”. La génesis de la STIN se entrelaza con la historia de Compañía Teatral Italo Argentina, controlada por Seguin. El primer acto de la STIN fue la compra del célebre Teatro Costanzi (29 de julio 1908). La operación tuvo un costo de 2,3 millones de liras.

Además de controlar el  Costanzi, la STIN se hizo cargo de la gestión de varias salas: Teatro Regio de Parma, el Regio Turín, el Carlo Felice de Génova, el Teatro Petruzzelli de Bari,  el Roma,  etc.

También los circuitos turísticos europeos y Parque de diversiones como el famoso “Jardín de Aclimatación De París”, hoteles y restaurantes, fueron parte de su visión empresarial en Europa.

Si bien Seguín vivía parte del año en Buenos Aires, en la calle Esmeralda 449 (Teatro Maipo y sede de la SAT), poseía agencias, o sucursales en Brasil, Nueva York y, por supuesto, Paris: en la calle Laffiite.  Su poderío económico queda también demostrado en su casa de veraneo en el sur de Francia: a comienzos de los años veinte compró la Mansión de Villa Eze-les-Pins, paradisíaco lugar en el que había vivido hacia 1914 el presidente Raymond Poincaré,  y que hoy es Patrimonio Cultural francés.

Relación con los Lombard

Comenta el compositor Enrique Cadícamo en sus memorias: En aquella época funcionaba en Buenos Aires una oscura organización del submundo del hampa cuyo cerebro actuaba en Marsella aparentemente como una pacífica Agencia Internacional de negocios artísticos para América Latina que no era otra cosa que una Agencia para promover el tráfico internacional de la trata de blancas. .. Sus organizadores eran los hermanos Lombard, cuatro hermanos corsos destacados dos en Marsella y dos en Buenos Aires (Alejandro y Mario) cuyo apellido pasó más tarde a ser rubro comercial de la empresa que se denominó “LOMBAR Tour”. Un tal Carlos Seguin, joven francés, adinerado, con elegante presencia de play boy internacional… era el dueño de las salas donde iban a actuar los componentes de la mercadería que enviaban de Europa, los Lombard.

De acuerdo a estas afirmaciones de Cadícamo sobre dichos del bandoneonista Juan Canaro, las actividades atribuidas a los Lombard parecen involucrar a Charles Seguín en terrenos prostibularios. Lo cierto es que la complejidad del tema y algunas contradicciones del libro de memorias de este famoso compositor, nos estimula a esclarecer estos rumores en el contexto de una investigación apoyada en fuentes fehacientes.

Podemos señalar que cuando los Lombard comenzaron a relacionarse con Seguin, éste ya era un poderoso empresario de diversos rubros que le dejaban enormes cantidades de dinero, además, de editor - propietario del influyente y prestigioso diario de la comunidad francesa, “Le Courrier de La Plata”. Es así que desde comienzos de siglo XX fue un hombre conectado con altas esferas políticas, sociales y económicas de la Argentina, considerado como “empresario argentino”  y representante de la cultura francesa en este país y el exterior. Por supuesto, este perfil no lo exime de relación con negocios turbios, sin embargo, tan inmenso rompecabezas comercial también amerita profundizar estas actividades a la luz del resultado de nuevas investigaciones.

Editor-Propietario de “Le Courrier de la Plata”

El diario Le Courrier de La Plata, fue fundado y dirigido por el francés Joseph Alexandre Bernheim en Buenos Aires, donde vivió hasta su muerte (1893). Se distribuía en ambas márgenes del Río de la Plata en las colectividades francesas radicadas en la Argentina y en el Uruguay. Con este diario Bernheim inició la venta callejera de ejemplares en la Argentina, ya que hasta entonces se realizaba por suscripción. Fue un poderoso medio que se mantuvo durante 81 años, hasta 1946.

Carlos Seguin Inició su gestión de Editor–Propietario de este diario junto a uno de los hijos del fundador, desde  el 1 de mayo de 1904 hasta el 24 de abril de 1911. Luego se creó una Sociedad Anónima: León Forgues (Presidente) y Louis Grandval, (Vicepresidente), acompañados por un Consejo de Administración en el que se encontraban Charles Seguin y el Dr. Manuel A .Montes de Oca, y un directorio de encumbradas figuras.

Claramente, los largos años de vínculos políticos, económicos, y los contactos con personajes influyentes, son parte de acceso de Seguin a las esferas de decisión, y darían cierta explicación a sus oportunidades, ascenso y poderío. Llegar a dirigir ese diario prestigioso no fue casual, es decir, mucho antes de 1904 estuvo relacionado con ese medio y con los miembros conspicuos de la comunidad francesa.

CHARLES SEGUIN

Socios financieros. Charles Seguin. El banquero.

El empresario supo sumergirse en las aguas del mundo financiero  obteniendo la confianza de estos círculos para obtener capitales e involucrarlos en sus proyectos, o asociándose a planes y obras de los financistas,  brindando los servicios de su red de contactos, infraestructura y, sobre todo, su habilidad administrativa.

Fue vasta y muy cercana la relación con la familia Tornquist, tanto con Ernesto (1842-1908) como con su hijo Carlos Alfredo (1885 –1953). Se integra y complementa en Iniciativas diversas con ambos financistas a lo largo de todo el país, en negocios inmobiliarios, construcciones, Hotelería, Sitios de recreación, Petróleo, minería,  Casinos, etc.

Otro grupo financiero afín fue La Casa Bemberg. Otto Peter Friedrich Bemberg (1827-1895) fue un empresario, financista e industrial alemán, creador de un imperio económico en Argentina. La marca de cerveza Quilmes fue fundada por Otto en 1888.  Fallecido en París, la compañía fue llevada a una posición dominante en el mercado por su hijo, Otto Sebastián (1858-1932)

Los Bemberg tenían ascendencia francesa, a través de Pedro Bemberg Boulle, y su hijo Otto, fue  Cónsul General en París. A todo esto,  Charles Seguín era accionista de la Compañía Quilmes, acciones que en parte se negociaban en el mercado europeo a través de la oficina de la South American Tour en París. Quilmes realizó importantes campañas publicitarias en El Courrier de la Plata, en el que como ya señalamos Seguin fue Editor Propietario y luego accionista y Consejero.

Nicolás Mihanovich (1848-1929), empresario naviero austrohúngaro, lideró su área del mercado en el Río de la Plata entre las décadas de 1880 y 1920. Su interés en un emprendimiento turístico en “El Real de San Carlos”, Colonia del Sacramento, Uruguay, iniciado en 1909,  se concretó con la construcción de un muelle, un Balneario, una Plaza de Toros, un frontón de paleta vasca, un Hotel y Casino. Charles Seguin, luego del cierre de la Plaza de Toros se hizo cargo durante años de todas las actividades de ese centro de diversión y esparcimiento, incluyendo obras de infraestructura hasta avanzada la década del ´20.

El empresario artístico, a través de la South American Tour puso toda la experiencia a favor de la atención, el entretenimiento y la recreación. Aire puro, tranquiidad, espectáculos y juego, fueron una excelente formula para atraer a las clases pudientes y un redituable negocio a pocos kilómetros de Buenos Aires.

Los barcos de la Cía. Mihanovich realizaban el tráfico de los materia prima, productos y y enseres  para las construcciones que necesitaba Seguin en sus Compañías en Misiones, Paraguay  Brasil.  No obstante, el banquero-empresario franco-argentino procuró tener sus propias embarcaciones y la relación con Mihanovich se fue complicando, tanto que llegaron a un juicio.

Los balances de SAT y de otras empresas de Monsieur Carlos nos muestran que una parte de los movimientos se encontraban bajo el título de “Banco Seguin”. Efectivamente, Seguin tuvo el rol de banquero en muchas de sus transacciones. De hecho, en Argentina y Europa lo presentaban como “empresario” o  “banquero”.

En sus negociaciones con los grandes capitalistas se manifestaba con  gran convicción, por momentos este perfil es visible en las misivas que se intercambiaban, o en los mismos convenios y contratos, apareciendo su modo contundente, a veces avasallador, para persuadir sobre las bondades de sus proyectos.

CHARLES SEGUIN
El ocaso del magnate

El dueño de la South American Tour había llevado una vida de grandes emprendimientos, lujos y viajes. Casado a los 48 años con la joven  británica Gwendoline Maud Davis, de 23, en febrero de 1925, tuvieron dos hijos: Carlos René (“Chuck”), nacido en 1926 y la pequeña Gwendoline (“Babs”), dos años después. La salud de Charles Seguin se había deteriorado a pesar de todos los esfuerzos por intentar su cura. Enfermo de los riñones escribía a su esposa en febrero de 1930: Gwen… Yo pensé tanto en mi muerte, me vi tantas veces a punto de morir, que ya no me importa. Pero quiero vivir para ustedes, y viviré. Pero es sabido que el dinero no compra salud y llegó el momento en que las inyecciones de “Salirgan” y el “Digitaline no le hicieron efecto. Se precipitó el final y falleció el domingo 30 de marzo de 1930, de insuficiencia renal, en alta mar, en viaje a Europa a bordo del “Lutetia”.

FRENTE DEL MAUSOLEO DE LA FAMILIA SEGUIN
EN EL CEMENTERIO DE MONTPARNASSE (PARÍS)


MAUSOLEO DE LA FAMILIA SEGUIN
EN EL CEMENTERIO DE MONTPARNASSE (PARÍS)
En 1916, año de la muerte de su padre, había hecho construir en el selecto cementerio parisino de Montparnasse un Mausoleo de granito de cuatro plazas, a perpetuidad. El habitáculo de líneas austeras exhibe en su frente como única leyenda la palabra SEGUIN. Fue ocupado, primero por su progenitor, a los 68 años, el “Monsieur Segal dit Seguin Jean, Isaac” (sic), fallecido el 25 de julio de 1916, luego por su madre: Camille Bloch, fallecida el 8 de septiembre de 1919 y, finamente, recibió en abril de 1930 al empresario. El cuarto espacio esperaba a Gwendoline, pero la viuda volvería a casarse y cuando falleció el 13 de agosto de 1949, ya divorciada, fue ubicada en un ataúd en un Panteón del Cementerio Británico de la Chacarita (Buenos Aires) y cremada en 2011.

GWENDOLINE MAUD DAVIES DE SEGUIN
En 1930 Gwendoline había quedado a cargo de los bienes millonarios de Charles. Sus viajes, el nuevo casamiento, y prolongadas estadías en Estados Unidos y Francia, hicieron que se desvaneciera una parte de la fortuna,  gastada por la viuda en sus intentos por mantenerse dentro de un ritmo de vida cercano a la aristocracia. Por otra parte, cifras fabulosas fueron a enriquecer a los abogados, lo que sumado a extraños manejos de terceros o posibles fraudes, en pocos años la Sucesión familiar perdió gran parte de la fortuna argentina y europea del empresario.

CHARLES SEGUIN
Destacado magnate de la noche e impulsor de decenas de rubros, tan sagaz y notable administrador, inexplicablemente, tras su muerte, como si no hubiera previsto u organizado el destino del fruto económico de sus esfuerzos, en gran medida su riqueza se desmoronó como un endeble castillo de naipes.


Fuentes:
Anuario Teatral Argentino,
Archivo Teatro Maipo
Archivos Particulares
Biblioteca Argentores
Biblioteca del Congreso
Biblioteca Legislatura Ciudad de Buenos Aires
Biblioteca Teatro Cervantes
Diario Clarín
Diario Crítica
Diario Crónica  
Diario El Diario
Diario El Mundo
Diario El Nacional
Diario El País
Diario El Plata  
Diario La Argentina
Diario La Nación
Diario La Prensa
Diario La Razón
Diario La Vanguardia
Diario Le Courrier de la Plata
Diario Noticias Graficas
Diario Tribuna
Diario Última Hora
El Diario español
Libro de Inventario del teatro Maipo, 1919-1920
Libros contables Teatro Maipo
Revista Avivato
Revista Caras y Caretas
Revista Comoedia
Revista Esto es
Revista Farol
Revista La Calle 
Revista Lyra
Revista Mundo Teatral
Revista Semana Gráfica
Revista Teatral de Buenos Aires
Revista Todo es Historia

*    Testimonios orales.

*  Archivo particular de Dominique Seguin: Libros contables, cartas, inventarios, memorándums, facturas, remitos, balances, acciones, fotos y planos de las empresas vinculadas a su abuelo Charles Seguin. 

*  Fotos de Charles Seguin y Gwendoline Maud Davis de Seguin,   Acciones de la SAT. (agradecimiento a Dominique Seguin)

Foto Teatro Scala (Gentileza INET, Teatro Cervantes)

Fotos de Mausoleo SEGUIN (Archivo Carlos Szwarcer)


Carlos Szwarcer © 


No hay comentarios:

Publicar un comentario